jueves, 5 de noviembre de 2015

Tráfico de tristeza...


Tráfico de tristezas, de dudas,  intentan moverse en mi pecho, intentan disipar la nube. 
  Se atoran tropezando unas con otras, desalientan mis pasos y se burlan socarronas de mi rutina... a medio día, aquí están, aquí van rompiendo con centellas luminosas el uso del tiempo laboral. 
    Nadie sorprende mi noche de neblina y silencios...Nadie advierte que entre coros, canciones, nombres, citas, encuentros,  y momentos rápidos de la mañana hasta el medio día  una nube ocupa mi pecho lenta abrumada... Alguien llama a la puerta... entra... el diálogo conmigo se detiene... 
   La cita clave del día ha llegado... la nube consigue quedarse atrapada entre mi alma y mi rutina, tic-tac-tic-tac-tic-tac-tic-tac...